Salida pedagógica Boyacá: una experiencia transformadora desde el tejido y la siembra
Este año los estudiantes de grado 6° y 8° respectivamente tuvieron la salida pedagógica a Boyacá, en esa gran aventura desarrollaron diversas actividades que les permitió trabajar el desarrollo de habilidades como las de pensamiento, investigación, comunicación, sociales y de autogestión.
Para nosotros en el Cañaverales International School las salidas pedagógicas son experiencias vitales que se dan fuera del aula, planeadas y estructuradas, de manera que les permita a nuestros estudiantes tener otras oportunidades para desarrollar habilidades.
“Cada una de las salidas pedagógicas son valiosas porque enriquecen el proceso educativo en el Colegio, al proporcionar experiencias prácticas, conectar el aprendizaje con la realidad y fomentar el desarrollo de habilidades, actitudes y el perfil IB de nuestros estudiantes”, comenta Carolina Avendaño, directora de bachillerato.
Así que en este blog queremos compartir con ustedes lo que fue y aportó esta salida para cada grado
Salida pedagógica Boyacá, grado 6°
En el último grado de primaria (6°) se realiza el primer viaje escolar que da el cierre de primaria. En años anteriores este viaje fue a Bogotá y el objetivo era empoderar a los niños, promover la habilidad de autogestión, habilidades que les ayuden en esta etapa que comienzan, la idea es que el viaje les permita ver que son capaces de lograr muchas cosas.
“La empresa con la que trabajamos se llama Andares y las experiencias giraban en torno a la naturaleza; el viaje aunque fue en un hotel, lo que permitía estar resguardados y seguros, no era un hotel con habitaciones sino que todo el tiempo dormimos en carpas tipo militares que son esas grandes que tienen camarotes, al final un día sí se dormía en car pas de camping”, nos cuenta Victoria López, directora de primaria.
El trabajo principal fue de autogestión, algo que no era ajeno para ellos pues desde esa sección del colegio se ha venido trabajando todo este año lectivo.
“La autogestión se vio en todo momento, desde situaciones simples como encargarse de sus pertenencias, hasta en algunas otras donde debían gestionar por sí mismos el cómo realizar cierta actividad”, explica la directora de sección, quién además asegura que “cuando esto sucede es realmente hermoso, porque es ver cómo luego de un año trabajando esta habilidad los chicos pueden hacer la transferencia y aplicarla a los diferentes contextos y situaciones”.
Victoria López
Precisamente parte de esas experiencias que marcaron a los chicos fue un taller donde les enseñaron a hacer ladrillos de adobe, “los niños cogían el barro lo amasaban con los pies, cogían el molde, los hacían y estaban inmersos en todo el proceso, ellos ahí no solo construyeron ladrillos, construyeron experiencias de aprendizaje significativo”.
Además de esto, hubo un taller de sembrado de hortalizas, “en el cual nuestros chicos tuvieron una experiencia maravillosa con una escuelita de la vereda donde nos quedamos. Ellos se conectaron de formas muy especiales con los niños de esta escuela y de hecho, al final por iniciativa de ellos, después del acercamiento, y de darse cuenta que los chicos no tenían balones para jugar, deciden recoger dinero para hacer una compra de balones y donarlos con el fin de que los niños de ese lugar pudieran disfrutar de actividades deportivas y lúdicas en su escuela”, puntualiza Victoria López.
Precisamente en esa escuela nuestros estudiantes experimentaron también un taller de sembrado de zanahorias y lechugas, lo cual les permitió la oportunidad de acercarse al contexto social, económico y cultural en el que observaron las expresiones culturales y las formas de vida de los boyacenses, en el trabajo de siembra.
Como parte de esa inmersión en el contexto sociocultural de Boyacá “fuimos a Villadeleyva e hicimos como una especie de yincana, con el fin de descubrir algunos lugares más icónicos y turísticos del lugar. En Ráquira tuvimos taller de alfarería, un espacio creativo en el que era gratificante ver cómo disfrutaban de la posibilidad de interactuar con estas herramientas como el torno”.
Al final, realizaron una dinámica para despedir el viaje, en esta cada uno evaluaba lo que había dicho que tenía como reto al llegar ahí y se reflexionaba si se había alcanzado y que otros logros personales .
Experiencia de Boyacá, grado 8°
Otro grupo que experimentó la magia de este departamento del centro de Colombia fue el grado 8vo para quienes la salida pedagógica a Boyacá fue un evento enriquecedor que les brindó la oportunidad de desarrollar y poner a prueba sus habilidades sociales y de autogestión, por fuera del aula.
De acuerdo con la docente y directora de grupo Luisa María Megudan, “durante el recorrido por la región y la visita a los diferentes lugares, se observaron interacciones significativas entre el grupo de estudiantes y un crecimiento notable en las habilidades y su desarrollo personal”.
Además, nos explica la docente, esta salida pedagógica se realizó en el marco de la unidad de indagación interdisciplinar ‘De la papa para el mundo’ la cual tenía como objetivo que los estudiantes comprendieran que el abordaje de la cultura implica diferentes miradas sobre los modos de vida y las construcciones sociales que se establecen alrededor de un territorio, las relaciones entre la vida y el territorio en un país biodiverso y multicultural donde convergen diferentes estilos de vida determinados por los vínculos culturales y éticos con el medio ambiente y la región.
“En este sentido, se buscaba que los estudiantes exploraran el patrimonio cultural e histórico de Boyacá, desarrollaran actividades de manera colaborativa en cada una de las experiencias, el campamento, la siembra y el taller de tejido de balones; fomentando el trabajo en equipo, fortaleciendo sus habilidades de comunicación de manera efectiva y promoviendo el respeto y la empatía entre ellos”, puntualiza Megudan.
Durante la salida pedagógica se realizaron visitas a sitios históricos donde los estudiantes tuvieron la oportunidad de recorrer lugares importantes para la historia de nuestro país en el marco de la ruta libertadora que emprendió Simón Bolívar, la ruta del dorado y la cosmovisión Muisca, lo que generó conversaciones enriquecedoras sobre la historia y la cultura de la región y del país.
No fue un viaje tipo turismo, fue un viaje tipo viajeros y como viajeros la consigna era diferente en todo sentido.
“Estaba mediado por la interacción con el espacio donde íbamos, reconocer qué parte de la cultura de Boyacá estaba muy arraigada a la tierra, entender todo el significado que tiene para ellos el territorio hablando de los aspectos locales y tejer en ellos ese interés en interactuar con lo social, local y regional. Fue hermoso ver lo que para ellos significó, muchos me decían cosas como ‘profe yo no sabía que teníamos un país tan maravilloso’ o ‘Desconocía la historia de esta parte del país’, añade, la docente Luisa María Megudan.
Una de las actividades en el marco de esta salida pedagógica fue la experiencia de conocer el Museo de Balones de Monguí en el cual tuvieron la oportunidad de hacer su propio balón, partir desde cero, “desde la esfera, ya con el látex, el pegamento y finalmente unir las piezas de cuero sintético. Tuvimos una experiencia al mejor estilo cañaverales en la que a través de algo puntual llegamos a reflexiones profundas”, puntualiza Luisa.
Es así como ambas salidas pedagógicas a Boyacá lograron consolidarse como experiencias enriquecedoras, no solo en términos académicos, sino que también contribuyeron significativamente al crecimiento personal y social de nuestros estudiantes. Al enfrentarse a nuevos desafíos y trabajar en equipo, nuestros alumnos pudieron aplicar y fortalecer las habilidades aprendidas en el aula, llevándolas a contextos reales.
En el Cañaverales International School, creemos firmemente que el aprendizaje trasciende las paredes del aula. Las salidas pedagógicas, como estas, son fundamentales para proporcionar una educación integral que prepare a nuestros estudiantes para el futuro. Estas experiencias no solo complementan el currículo, sino que también inspiran a los estudiantes a ser curiosos, reflexivos y comprometidos con su entorno.
Todo con el fin de continuar fomentando y apoyando actividades que impulsen a nuestros estudiantes a descubrir, explorar y aprender más allá de los libros, reafirmando nuestro compromiso con una educación de calidad y un desarrollo holístico. Esperamos con entusiasmo las próximas aventuras y las nuevas oportunidades de aprendizaje que nos deparan, nos vemos en otro blog.
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