Kínder, un mundo de sorpresas

Cada niño va construyendo su identidad, tan única como un diamante, tan auténtica cómo su huella y tan particular como su voz. Los estudiantes de Kínder A y B se cuestionaron, indagaron y reflexionaron sobre la pregunta ¿Quién soy yo?, ¿Qué identifica a mi compañero/a?, ¿Qué semejanzas y diferencias tenemos?  Y para los niños de su edad la pregunta más importante… Estás semejanzas y diferencias ¿nos permite ser amigos?
Los invitamos a conocer más de cerca esta Unidad de Indagación que permitió a cada uno de nuestros estudiantes sentirse único y especial, afianzando los lazos de amistad que se crean en la comunidad Cañaveralina.

Siguiendo nuestra metodología de aprendizaje Reggio Emilia, donde los niños pueden indagar de acuerdo con sus intereses. Esta Unidad de Indagación para los grupos de Kínder A y B les permitió, centrarse y enfocarse en sus partes del cuerpo, en sus habilidades, en auto reconocerse para reconocer al otro. Pero también, trabajar otros enfoques desde ese punto de partida como el de crear una comunidad, ser más empáticos y practicar el respeto hacia otros como ocurrió en el grupo B.

Partiendo de la idea central de la Unidad de Indagación la diferencia nos permite conocernos como únicos, cada uno de los grupos inició su etapa de reconocimiento desde una actividad de provocación llamada Encontrar la creación más hermosa que existe en el mundo (Que eran ellos mismos). En esta experiencia cada uno de ellos se reconoció con sus características físicas inicialmente, descubriendo que son seres únicos y que cada uno de ellos es importante.

En el caso del grupo de Kínder A, los niños y niñas se han interesado mucho en reconocer su aspecto físico y descubrir su identidad…  El reconocimiento de mí mismo y del otro en una diversidad de gustos, emociones y relaciones. El autorretrato ha sido utilizado con una intensión pedagógica, como un lenguaje que promueve un encuentro entre su propia identidad. Por ejemplo, en una de las actividades de provocación realizadas con espejos y fotografías de ellos en su etapa de nacimiento, los niños del grupo decían “Todos tenemos ojos, pero nuestros ojos son diferentes, cada ojo tiene una forma y una mirada distinta; por medio de los ojos podemos descubrir quién es cada uno”.

«Algo muy importante que descubrieron es que pueden saber quiénes son a través de su cara, de su cuerpo y a través del nombre, el nombre es muy importante para ellos. Los niños reflexionan teniendo en cuenta sus diferencias, por ejemplo, si los nombres se repiten para eso está el rostro para saber quién es quién y la voz, porque la voz es única de cada uno»

— Siomahara Quino, Homeroom Teacher Kínder A.

Adicionalmente, en su camino por la Unidad de Indagación de Kínder los dos grupos han trabajo su esquema e imagen corporal, que va mucho más allá del aspecto físico siendo conscientes de cómo a través de su cuerpo logran demostrar quienes son ellos, cómo a través del movimiento o una expresión corporal pueden decir si están enojados o pueden expresar si están tristes; estos procesos ayudan a reconocer las emociones.

«En el caso de Kínder B, a través de los rompecabezas con los rostros se han descubierto que los ojos y la nariz son partes de sus caras que más los diferencian. Al momento de hacer experimentos con las expresiones éstas les ayudan a identificarlos y expresar cómo se sienten, si están felices o están enojados, la importancia de aprender a leer estas expresiones para saber qué siente el otro aceptando la diferencia y al otro como ser, permitiéndoles poner en práctica en el grupo el respeto y la empatía, “¿Qué te está diciendo tu compañero con las expresiones de su cara? No le gusta o está feliz, se siente chévere o le disgusta, practicamos a través del reconocimiento identificar las emociones”.

— Ana María La Torre, Homeroom Teacher Kínder B.

¿Quién soy yo?

Al principio de la unidad todos se hacen la pregunta ¿quién eres tú? La respuesta era mencionar su nombre. Pero ¿quién eres tú? sin decirme tu nombre, los niños decían -ay no sé porque si no digo mi nombre, no sé quién soy. Ahora a través de todo ese conocimiento que han adquirido preguntamos de nuevo ¿Quién eres tú? Y la respuesta es compuesta: soy un niño, me gusta saltar, soy diferente a mi amigo porque a él le gusta el helado, pero a mí no.

Esta unidad ayudó mucho a esos lazos de amistad, a que se reconozcan en un espacio donde hay más niños, pero con diferentes pensamientos y que, a pesar de ello, todos se pueden relacionar entre sí. Con este tipo de experiencias queremos que los niños logren identificarse como seres únicos y especiales.

Los niños realizaron la presentación de qué les gusta y que no, hicieron un show de talentos, disfrutaron de un spa y participaron de la experiencia de moldearse como si fueran una masa de arcilla. Estas actividades ayudaron mucho a descubrir todas las habilidades que tienen, qué pueden hacer con su cuerpo y cerebro, identificaron qué sensaciones gustan o les disgustan.

Construyendo una comunidad

En Cañaverales International School trabajamos con los intereses y las necesidades de los niños y niñas de cada grupo. Kínder es el primer año formal, aquí convergen diferentes estudiantes de diversos jardines, buscamos con esta primera Unidad que ellos empiecen a crear ese sentido de comunidad, entender lo que representa esa palabra, aunque todos somos diferentes y todos somos únicos, todos podemos ser amigos y podemos compartir.

A través de esta Unidad de Indagación de Kínder identifican sus habilidades, intereses, sus diferencias y semejanzas; esto les ha servido para conocerse, reconocerse y reflexionar que, a pesar de las diferencias, también pueden ser amigos, se pueden ayudar entre sí.

Cómo conocernos y reconocer al otro nos permite construir una comunidad y construir vínculos a largo plazo, conceptos que también manejamos en las Prácticas Restaurativas.

Afianzando los atributos IB

Los atributos que se manejaron en la Unidad de Indagación de Kínder A y B fueron Open Minded, Communicator & Risk Taker.

Durante esta Unidad de Indagación las docentes Siomahara Quino y Ana María La Torre enlazaron las líneas de indagación, la idea central y los atributos del perfil IB. Los niños y niñas del grado Kínder empezaron a relacionarlo todo, apropiándose y expresando las siguientes verbalizaciones:

Los padres de familia comparten sus apreciaciones sobre la Unidad de Indagación de Kínder y el aprendizaje de sus hijos/as:

«Para Santino creo que fue muy valioso conocer que cada persona es única y hermosa. Cómo mamá esta actividad me parece muy importante, pues de manera divertida se conocen a sí mismo y a sus compañeros. Descubrir sus talentos, es conocerlo más a través de él«

Atte, Mamá de Santino

«Nos integramos como padres conocimos qué perciben nuestros hijos de nosotros, también conocimos su identidad, también cómo apoyar y fortalecer su identidad. Ver a los niños tan felices fue muy emotivo«

Atte, mamá de Juan

«Para Isaac, creo que fue muy productivo la unidad debido a que, por medio de la diversión, movimiento, observación entre otras aprendió que no sólo es Isaac y que las diferencias son geniales… Para mí, agradecimiento con todo el equipo y orgullo total de mi niño«

Atte, mamá de Isaac

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